En Alemania Frida Von Kleinsberg, espía de la Abwehr , recibe la misión de trasladarse a New York y buscar a un antiguo conocido, Alfonso Altamira, físico español , exiliado y que da clases en un instituto ; para obtener información e introducirse en el círculo de científicos exiliados.
Me ha gustado el libro, con esos aires de cine negro , con ese sabor del New York de los años 30. Me ha encantado la figura de Frida: bella , fría, tan hábil debajo de las sábanas como empuñando una pistola o sacando de su liga un cuchillo.........me encandilan estas mujeres je,je,je,je!. El escritor la compara en ocasiones con estas dos diosas del celuloide:
Para los que no lo sepan , la de la izquierda es Rita Haitworth y la de la derecha Verónica Lake. Con estos aditamentos , bien condimentados por una historia creíble y documentada, una narración ágil, y alguna que otra sorpresa hace que resuelte entretenido y ameno. A leer!
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